En Rotterdam, la marca Robijn lanzó una colorida campaña para promocionar un nuevo suavizante tropical. Gracias a un dispositivo olfativo, los transeúntes pudieron descubrir la fragancia floral del producto.
En el centro de la campaña había un dispositivo olfativo especialmente diseñado, colocado en vallas publicitarias, que permitía a los transeúntes descubrir y oler la fragancia floral del nuevo suavizante de la marca.
Esta experiencia multisensorial invitaba a los habitantes de la ciudad a descubrir la frescura y dulzura del producto de una forma directa y atractiva. Situada estratégicamente en una calle muy transitada, la campaña permitió a Robijn destacar ofreciendo a los consumidores una experiencia.
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