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La promesa de "Dove 100" es sencilla: no dejar rastro, sea cual sea el color de la ropa que se lleve. El objetivo de la campaña es educar a los consumidores sobre los beneficios de este producto. Para lograrlo, la marca desarrolló una innovadora activación llamada "100 Colores" en varios centros comerciales de Sudáfrica. La activación tuvo lugar en zonas de gran afluencia, como el Mall of Africa de Johannesburgo y el Gateway de Durban. La campaña utilizó tecnología punta de reconocimiento del color, la primera vez que una marca de belleza la utiliza en una activación B2C. En los centros comerciales se instalaron pantallas digitales interactivas equipadas con una cámara que identificaba automáticamente el color más dominante de la ropa. Una vez detectado el color, la aplicación modificaba la imagen mostrada en la pantalla para reflejar su atuendo.