El concepto radical de la butaca D1 de Peter Keler ha calado de inmediato en Tobias Groß. El diseñador de Colonia, que también reinterpretó la mesa de té de Erich Brendel, ha vuelto a sumergirse en el mundo del color. Su objetivo: hacer que la D1 sea aún más llamativa con una combinación de colores moderna. Por ello, aplicó tonos más oscuros al "armazón" del sillón, mientras que se decantó por un tono más claro para el "interior", es decir, el asiento y el respaldo.
De este modo, el "padre" de todos los sillones, que ha inspirado a generaciones enteras de diseñadores, adquiere una presencia sorprendentemente ligera en la habitación. Y un nuevo impacto: parece un marco estéticamente perfecto para la persona que se sienta en él. Un marco que sumerge el cuerpo en un mundo de formas y colores como un cuadro.
La forma cúbica básica de la nueva serie D1 se presenta ahora en varios tonos de azul y pasteles ligeramente más claros. Su tejido, un suave y acogedor terciopelo, abraza a la persona sentada como un cálido abrazo. Las ruedas, que permiten mover y girar la silla sin esfuerzo, siguen siendo tan fascinantes como siempre.
Para una combinación interesante, la D1 puede combinarse con la nueva versión de la mesa Brendel de Tobias Groß: un dúo con colores frescos y una movilidad ágil que personifica la vida moderna y contemporánea.
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