Animada por la pasión por los estilos de época y el gusto por la extravagancia en el entorno doméstico, he querido interpretar el tema del picaporte con originalidad y glamour.
Al igual que una joya realza la tez de quien la lleva, el detalle de la manilla embellece la superficie de la puerta, convirtiéndose en el centro de atención.
El elemento del eje de Dolce Vita se inspira en la estilística clásica. La palanca es un cilindro perfectamente minimalista. Juntos generan una relación inédita entre dos lenguajes aparentemente antitéticos, dando como resultado una maravillosa polaridad, fusionada por primera vez en el diseño de una manilla. - Marcel Wanders
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