La escalera y la rampa se asemejan a algunos obstáculos cotidianos comunes. Caminar por una pendiente inclinada y superar escaleras. El uso más simple es simplemente caminar de un lado a otro en el módulo, pero con variaciones en la tarea, se pueden entrenar habilidades específicas. Por ejemplo, enfocándose en el equilibrio caminando sin apoyo de la mano o enfocándose en la fuerza y la movilidad usando deliberadamente pasos tan largos como sea posible. Las escaleras están disponibles en dos versiones diferentes: escaleras normales o escaleras empinadas. Estos también se pueden usar para ejercicios simples y efectivos como step-ups y zancadas. La capacidad de caminar con seguridad en una pendiente inclinada o en declive es muy importante para los ancianos. Si la postura del cuerpo no está alineada correctamente con la superficie, aumenta el riesgo de caída. Con el apoyo de los rieles, esta habilidad se puede entrenar en un entorno seguro.