Uno de los mayores problemas de las personas mayores son las caídas. Estos accidentes suelen ocurrir porque la persona mayor no es capaz de superar o reaccionar ante los cambios en el pavimento u obstáculos. El desafío de la superficie brinda la oportunidad de, en condiciones seguras, entrenar para superar los obstáculos típicos que se encuentran en la naturaleza y los entornos urbanos. Algunos de los desafíos se centran en el importante levantamiento del dedo del pie. Ya sea en obstáculos pequeños o más grandes como el bordillo. Otros desafíos se centran en el control general del pie y del tobillo. Finalmente, las diferentes superficies y materiales estimulan la retroalimentación sensorial que también mejora la estabilidad de la marcha.