Torneraj es un asiento de espíritu revolucionario.
Diseñado por Giorgio Ceretti, Pietro Derossi y Riccardo Rossi a finales de los años sesenta, es uno de los símbolos del espíritu "out of the box" de Gufram. De hecho, Torneraj es un asiento que se rebela contra las imposiciones, en pleno espíritu de diseño radical: trata de oponerse al peso de uno y siempre vuelve a su forma inicial -lo aplastas y vuelve a acorralarse- y se opone a la idea de la novedad perenne en las cosas. Torneraj es un objeto que busca el desgarro y el desgaste; necesitamos usarlo para descubrir su verdadera esencia, su significado más profundo. De hecho, el uso répétitif de Torneraj creará grietas en la superficie del asiento, que le darán un valor añadido con el paso del tiempo.
Las formas de geometría elemental (una cuarta parte de un cilindro), junto con los colores primarios de la superficie (el fondo es una ligera trama a cuadros blancos), hacen de Torneraj una forma casi arquetípica, un modelo primordial. Aunque no parezca un sillón, se transforma en asiento por el peso del cuerpo, jugando así con la ambigüedad forma-función, que siempre ha sido uno de los rasgos distintivos de Gugram.
Torneraj es una pieza realizada en espuma de poliuretano recubierta de Guflac, el acabado especial y único patentado por Gufram que permite hacer que el poliuretano parezca cuero, manteniendo su flexibilidad y suavidad. El orificio en el centro del respaldo facilita que soporte el peso del cuerpo y vuelva a su configuración original; al mismo tiempo, funciona como asa, para que el asiento pueda transportarse con facilidad, resaltando así su espíritu libre y nómada.
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