Parsons Brinkerhoff Construction Services, en una empresa conjunta con Potomac Crossing Consultants, fue contratada para diseñar y construir un nuevo puente Woodrow Wilson que conectara Maryland con Virginia. El puente levadizo original de seis carriles, construido en los años 50, era incapaz de soportar el creciente volumen de tráfico. El objetivo de Potomac Crossing Consultants era prever las necesidades de tráfico de los próximos 100 años e incorporarlas al nuevo diseño. El proyecto tardaría unos diez años en completarse y daría lugar a dos nuevos puentes levadizos con un total de doce carriles. Dos de esos carriles se destinarían a la futura circulación de vehículos de alta velocidad (HOV) y de tránsito. También habría una pasarela peatonal que conectaría los parques y senderos de Maryland con los del lado de Virginia.
Debido a la duración y complejidad del proyecto, Parsons Brinkerhoff necesitaba espacio para alojar a los trabajadores durante las fases de planificación y construcción. Necesitaban alojar a ingenieros, arquitectos, equipos de construcción y de trabajo exclusivos para cada fase del elaborado proyecto. A medida que avanzaba la construcción del puente, también había que reconfigurar el interior del espacio temporal. Querían trabajar con una empresa que se convirtiera en parte integrante del equipo; querían a WillScot.
Diseñamos (2) edificios de oficinas modulares Redi-Plex de cinco secciones con construcción llave en mano para cada lado del puente. Cada complejo albergaba hasta 70 ingenieros, arquitectos e inspectores. También proporcionamos contenedores de almacenamiento y oficinas de campo estándar para los subcontratistas.
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