Al pensar en el Tíbet, te imaginas un lugar místico donde viven y meditan miles de monjes. Alexandra David Néel, lo tenía muy presente cuando llegó al Tíbet en 1926. Era la primera mujer de la historia en hacerlo. El sofá Tíbet es un mueble para descubrir. Cálido pero a la vez fresco, cuenta con unas líneas características y un acabado delicado. Una mezcla que da como resultado un producto cómodo y acogedor. La exploradora parisina cumplió los 100. Desconocemos si Tíbet podría aguantar tanto pero lo que si sabemos es que una vez que lo pruebes, no podrás vivir sin él.