Mantenimiento. Una prioridad absoluta.
Para embellecer la ciudad y ofrecer un servicio irreprochable a los habitantes, turistas y visitantes, somos inflexibles con respecto a la limpieza y funcionalidad de nuestro mobiliario urbano, independientemente de dónde esté instalado. El mantenimiento preventivo, las revisiones periódicas, la formación de los empleados y unos procedimientos estrictos garantizan una calidad inigualable en más de 80 países.
Experiencia. Del diseño al mantenimiento.
Para cumplir nuestras normas, que son las más estrictas del sector, nosotros mismos nos encargamos de todos los servicios de mantenimiento y conservación. Lavar una marquesina de autobús con un mínimo de agua o sustituir un cristal en pocos minutos requiere una verdadera pericia. Nuestros equipos técnicos son parte integrante de nuestra empresa y reciben una formación rigurosa. En 2020, representan más de la mitad de nuestra plantilla. Sus comentarios hacen posible que nuestros diseñadores y nuestro departamento de diseño creen un mobiliario urbano cada vez más fácil de mantener.
MANTENIMIENTO. Eficacia de la velocidad en cualquier entorno.
Los mecanismos internos de las ciudades y los centros de transporte no tienen secretos para JCDecaux. En la calle, en los aeropuertos, en las estaciones de metro o en los centros comerciales, trabajamos con discreción, a menudo de noche o en horas valle, respetando escrupulosamente las consignas y los procedimientos de seguridad. Nuestro objetivo es realizar el mantenimiento y la conservación sin perturbar la vida cotidiana de los habitantes de la ciudad ni las actividades de nuestros socios. Eficacia, precisión y rapidez son las consignas de todo lo que hacemos.
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