Patricia Urquiola diseña un espejo poco convencional y refinado que, desde el nombre, anula la vanidad y realza esa obra maestra de manufactura que es la murrina en vidrio colado.
Concebida como un círculo perfecto, No Vanitas permite reflejarse en el gran perímetro exterior y sitúa en el centro la murrina hecha a mano por artesanos del vidrio mediante un proceso complejo y elaborado.
CARACTERÍSTICAS
La "morisa", el cordón de vidrio típico de la tradición de Murano, está grabada con un motivo a rayas y ha sido aplicada manualmente alrededor de la circunferencia de la propia murrina. En la parte posterior del objeto, una luz LED activada a través de un sensor de proximidad colocado debajo del espejo, crea un sugerente efecto óptico que recorre todo el perímetro e ilumina la murrina central.
MATERIALES
Cristal de Murano, soporte de madera lacada en negro.
ILUMINACIÓN
Elemento adicional en termoformado negro para la versión con luz LED.