El aparador Galileo es un juego de contrastes: tiene una cubierta extremadamente simplista, una forma cúbica lisa que contrasta con el floreado decorativo que cubre por completo la superficie frontal; la superficie lisa de los laterales contrasta con el movimiento creado a partir del gofrado tridimensional, una técnica especial y exclusiva.
Todo ello revestido íntegramente en piel, para crear un sorprendente efecto de claroscuro.
Visualmente, un mueble muy sencillo, pero que confiere una fuerte personalidad al ambiente.
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