Diseñado por Terry Pawson & Architekture Consult, la Ópera de Linz es uno de los teatros más vanguardistas del mundo, tanto por las tecnologías utilizadas como por su acústica casi perfecta, gracias también a las butacas desarrolladas a medida por Aresline.
La planificación acústica de teatros y salas de conciertos es un reto porque implica una comunicación "emocional" y a menudo el mensaje sonoro es directo y no se dispersa a través de sistemas de amplificación. Por ello, la búsqueda y selección de los materiales y su forma son imperativas, al igual que lo es trabajar con asesores acústicos profesionales capaces de equilibrar cuidadosamente la reflexión y la absorción en función del uso de la sala y de las posibles variaciones de presencia del público, mediante el desarrollo y análisis de modelos acústicos tridimensionales.
La elección de las butacas para teatros y salas de música, donde el mobiliario desempeña un papel activo en el rendimiento acústico, es importante porque la presencia del público puede convertirse en una variable no calculable e imprevisible. Es necesario crear asientos que ofrezcan una absorción acústica constante, tanto si las butacas están libres como ocupadas, para evitar cualquier cambio considerable en la respuesta acústica de la sala en función de la presencia del público. En estrecha colaboración con los diseñadores y el asesor acústico, nuestro objetivo es garantizar que la butaca tenga la misma respuesta acústica, independientemente de que esté ocupada o vacía.
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