Jarrón soplado hecho a mano con acabado craquelado en cristal transparente.
El procedimiento utilizado para obtener este particular acabado consiste en sumergir el vidrio chamuscado en un cubo de agua durante muy poco tiempo, lo que crea un choque en el vidrio, agrietándolo.
A continuación, el maestro debe soplar rápidamente para expandir las grietas que, al dilatarse, crean esta textura.
El resultado es imprevisible y hace que cada objeto sea único en su género
---