El periódico y una copa de vino: El sillón "cantilever", diseñado por Anton Lorenz, es un asiento elegante y cómodo que ofrece relajación de la vida cotidiana. Anton Lorenz, empresario de origen húngaro, reconoció pronto el potencial de la idea del "voladizo" de Mart Stam y la puso en práctica en este sillón, pero inicialmente de forma rígida.
Mucho más tarde, esta idea fue retomada por Tecta y desarrollada en los talleres de Lauenförde. Se han perfeccionado las proporciones, se ha mejorado el diseño y se ha añadido la función de movimiento cinético. Una intervención casi invisible: sin ninguna tecnología visible, sólo moviendo y desplazando el cuerpo, el be-seater puede pasar continuamente de la posición sentada erguida a la posición tumbada relajada.
El "sueño de sentarse sin peso" de Marcel Breuer está al alcance de la mano con este sillón. El asiento, tejido a mano, y el armazón, de líneas intemporales, pueden coordinarse en distintos materiales y combinaciones de colores.
Mucho más tarde, esta idea fue retomada por Tecta y desarrollada en los talleres de Lauenförde. Se han perfeccionado las proporciones, se ha mejorado la construcción y se ha añadido la función de movimiento cinético. Una intervención casi invisible: sin ninguna tecnología visible, con sólo mover y desplazar el cuerpo, el Be-Seater puede pasar continuamente de una posición sentada erguida a una posición tumbada relajada.
El "sueño de sentarse sin peso" de Marcel Breuer está al alcance de la mano con este sillón. El asiento, tejido a mano, y el armazón, de líneas intemporales, pueden coordinarse en distintos materiales y combinaciones de colores.
---