Las persianas correderas consisten en paneles que pueden desplazarse manualmente hacia la izquierda o la derecha, dejando así al descubierto o tapando las ventanas. Cuando se abren, las persianas se alejan de las superficies acristaladas, proporcionando una visión sin obstáculos a través de las ventanas.
Las contraventanas pueden moverse a cualquier posición, lo que permite controlar la cantidad de luz solar que entra en la habitación y crear tanta intimidad como se desee en cada momento.
Los paneles disponen de rodillos para rodar sobre la guía inferior y se guían sobre rodillos laterales en la guía superior.
Este sistema se adapta a paneles de grandes dimensiones y peso, ya que los carros se instalan debajo del panel. Los carros ruedan sobre una guía inferior ovalada, mientras que la guía superior proporciona estabilidad horizontal y guía al panel. Dibujo de sección transversal sobre paneles deslizantes, hasta tres guías disponibles.
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