De la creación de un molde especialmente diseñado, nace la lámpara Jellyfish, del nombre recuerda a una medusa, a la vista gelatinosa. La impresión del molde le da a la lámpara una decoración refinada.
Realizada en la elaboración del vidrio blanco lechoso, de forma oblonga, resulta tan simple y esencial como la luz que emana.