La gama Ghost nace de una idea simple pero revolucionaria que, gracias a una cuidadosa ingeniería, se ha logrado traducir en un producto industrial: creando verdaderas cavidades luminosas dentro del material y ocultando el cuerpo de iluminación para hacer de la luz el único protagonista de la arquitectura. Este concepto, diseñado inicialmente para muros de hormigón moldeados in situ, se presenta hoy en día en nuevas variantes innovadoras que lo transforman en un producto adecuado para muchos materiales de construcción: módulos aislantes, paredes de ladrillo, paredes en conglomerado de cemento u otro material a enlucir.