Tabique corredero

de vidriode aceroprofesional

La Pared de Cristal que desaparece es un producto estéticamente sencillo, pero muy funcional a la hora de compartimentar automáticamente un espacio. El Glass Wall está formado por paneles horizontales de vidrio laminado antibalas que se deslizan por guías verticales que se instalan en las paredes existentes. A medida que sube, el Glass Wall se oculta en un hueco del falso techo. De este modo, no queda visible ningún tabique y todas las zonas quedan conectadas, como si no hubiera nada que las separara. La estructura de vidrio y acero hace que la Glass Wall sea perfecta para cualquier entorno, ya que no impone ninguna restricción al diseño previsto por el cliente. Pero este muro debe ser seguro, además de estético y práctico. Concebida para separar el vestíbulo del cajero automático o la zona de autoservicio de un banco del resto de la sucursal durante las horas de cierre, debe ser tan segura como todos los demás elementos que componen los diseños bancarios diseñados por SAIMA (Gate Box, Sliding Box, Tel Box). Por esta razón, por muy elegantes, discretos y luminosos que sean, los paneles de vidrio templado son ante todo resistentes. Su espesor es determinante tanto para el coeficiente de reducción del ruido como para la seguridad pasiva de la pared.