Recuperador de calor residencial DRU

para casa

ErP 2018 Eficiencia de recuperación de calor superior al 90 5 tamaños y 2 configuraciones disponibles: vertical u horizontal para instalación en falso techo La calidad del aire y, por tanto, su temperatura, humedad y pureza son componentes clave para el bienestar general en el interior de un edificio. Especialmente en invierno, cuando la apertura de las ventanas para el intercambio de aire da lugar a importantes pérdidas de calor, un sistema de ventilación integrado es la mejor solución para mantener los niveles de rendimiento térmico en el edificio, así como la calidad del aire interior. La reciente legislación sobre ahorro energético en los edificios y los nuevos logros tecnológicos en el campo del aislamiento térmico y el sellado de ventanas y puertas, han hecho que las viviendas modernas sean más confortables en términos de calor y sonido, pero las han transformado en entornos totalmente herméticos, con el riesgo de convertirlas en "trampas nocivas" debido a la producción doméstica de contaminación. El principio básico es conseguir que el edificio no sólo esté bien aislado, sino que sea muy hermético. Un sistema de ventilación mecánica eficaz es esencial para garantizar un cambio de aire adecuado y una atmósfera sana en el interior de los locales. La renovación del aire en el interior de las habitaciones es esencial para un saneamiento y una vivienda adecuados, e incluso la Directiva europea 2002/91/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 16 de diciembre de 2002, relativa a la eficiencia energética de los edificios, citaba la "necesidad" de ventiladores de uso estándar en los edificios. Esta "necesidad" choca, sin embargo, con la necesidad mundial compartida, y recogida en la Ley italiana 10/91 y en los Decretos Legislativos 192/05 y 311/06, de mejorar la eficiencia energética de los edificios para limitar el consumo.