Las nuevas tendencias hacen hincapié en la importancia de los materiales respetuosos con el medio ambiente y con los niños, y señalan que la madera es el material más apropiado para construir jardines de infancia. Esta guardería en las afueras de Ljubljana es un brillante ejemplo de cómo se puede utilizar la madera para proporcionar calidez y colores juguetones. Las láminas de colores de la fachada se pueden girar a gusto de los niños para que puedan crear por sí mismos el aspecto de su jardín de infancia. Estos elementos estimulan la creatividad, la iniciativa propia, demuestran alterabilidad y adaptabilidad, y proporcionan a los niños una prueba visual de su "trabajo".
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