En la antigüedad, uno de los mayores retos a los que se enfrentaban los alquimistas era la búsqueda de la Piedra Filosofal o la Quintaesencia, el elemento capaz de revelar los secretos de la vida y la materia, como el elixir de la longevidad o la transmutación de los metales comunes en oro. A través de la alternancia de varios hexágonos, una superficie creada con la colección Alchimia ofrece formas y geometrías cambiantes para crear una armonía decorativa con motivos arabescos y de patchwork o desplazarse hacia una ilusión de formas, dimensiones y profundidades obtenidas por el uso equilibrado del color
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