Una propuesta dedicada a los que buscan practicidad y racionalidad, una composición aparentemente simple, pero que propone, grandes espacios de almacenaje, y geometrías atractivas, superadas por un espejo de dimensiones importantes, para dar luz y espacio a cada habitación.
La ranura atraviesa las unidades, convirtiéndose en un elemento cualificador para el mobiliario, cuya elegancia se ve acentuada por el acabado antracita del interior. Agradable y funcional el juego de módulos altos abiertos que se colocan sobre la encimera en Gres Emperador.
Parece un juego de encaje este mueble, donde el equilibrio de los elementos está pensado al milímetro. Los paneles laterales (opcionales) no son puramente decorativos, sino que contribuyen a realzar la imagen del conjunto.
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