La iluminación exterior desempeña un papel fundamental en la estética y la funcionalidad de espacios al aire libre, como parques, calles, plazas y fachadas de edificios. Para lograr una iluminación eficiente y atractiva, el uso de materiales adecuados es esencial. En este sentido, el metacrilato y el policarbonato se han convertido en opciones populares debido a sus características únicas. Veamos las ventajas, las aplicaciones y los sistemas de iluminación exterior con metacrilato y policarbonato, así como el uso de otros plásticos en esta área.
El metacrilato y el policarbonato ofrecen una serie de ventajas significativas para la iluminación exterior. Ambos materiales son transparentes y presentan una excelente transmitancia de luz, lo que permite una dispersión uniforme y una distribución eficiente de la iluminación. Además, son resistentes a los rayos UV, lo que evita el deterioro y el amarillamiento debido a la exposición prolongada al sol.
En cuanto a la resistencia, el policarbonato es un material excepcionalmente resistente a los impactos, aproximadamente 200 veces más fuerte que el vidrio. Esta característica lo convierte en una opción segura y duradera para aplicaciones en las que la protección contra golpes y vandalismo es esencial. Por otro lado, el metacrilato destaca por su alta resistencia a la intemperie, la abrasión y los productos químicos, lo que garantiza una larga vida útil y un mantenimiento reducido.