Kawara debe su nombre a las tejas tradicionales japonesas que cubren los tejados de silueta triangular de los edificios sagrados de Japón. La versión de suspención horizontal, con uno, tres, cinco o siete módulos de aluminio extruido orientables y conectados mediante pequeños anillos de unión, permite dirigir la luz con precisión. Las acanaladuras que recorren la parte posterior redondeada confieren elegancia a la pieza, añadiendo un refinado detalle estético. Las diferentes configuraciones permiten dirigir la luz directamente hacia la mesa, el techo o con un ajuste de 45°, ofreciendo soluciones personalizadas. La tira de LED regulable permite ajustar la intensidad de la luz, creando el ambiente adecuado en cualquier espacio.