En Panaget, el envejecimiento de los suelos de madera se inspira en el bello material que es el roble en su estado original. Este artículo se presenta con 2 chaflanes envejecidos (o biselados) trabajados a la manera tradicional para mayor autenticidad. Un suelo de madera de roble aceitado con un tacto sedoso incomparable.
Lo mejor de los suelos pálidos es que le permiten experimentar con combinaciones de colores y son adecuados para una amplia gama de usos. Este suelo de roble francés, con su tenue brillo blanco, aporta luminosidad a un interior. Para darle más calidez, combínelo con paredes o adornos de colores vivos y brillantes.
Imagine su futuro salón completamente abierto al mundo exterior. Para revelar toda la belleza de la luz natural, este suelo de madera laminada y aceitada está disponible en un tono tiza ultraluminoso. ¡Nada transformará mejor su espacio, aportándole un aspecto chic y moderno!
Las líneas puras y sencillas de este diseño lo convierten en una verdadera atracción. El suelo de roble francés blanco tiene un acabado al aceite que le confiere un aspecto aún más elegante y natural. Queda especialmente bien con paredes pintadas, como esta azul, aunque también combinaría perfectamente con rosas o verdes.
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