Lo último en elegancia ergonómica, la silla AYA™ se basa en los principios del movimiento natural del cuerpo al reclinarse. La sencillez de su funcionamiento utiliza el propio peso del ocupante para controlar la posición del asiento. Al reclinarse y detenerse, la silla permanecerá en esa posición. No hay control de tensión, ya que el peso del ocupante sube una inclinación de diez grados, utilizando la gravedad como resistencia y la fricción como control de la posición. Sólo hay un mando en la silla que ajusta la altura y bloquea el asiento en una de las cinco posiciones.
---