Al igual que el hielo agrietado/fundido, el Crackle Glass se produce utilizando técnicas exclusivas de fusión y laminación. Este vidrio arquitectónico se compone de tres capas de diferentes tipos de vidrio, que se fusionan y se laminan para crear un espejo, para crear un vidrio de seguridad. Idealmente instalado en aplicaciones de revestimiento, la luz entra a través del Crackle Glass y el panel de vidrio texturizado, mientras que el panel trasero con espejos refleja la luz a través del Crackle Glass. Esta característica reflectante resalta el Crack Glass, creando un efecto chispeante que simula el brillo multifacético de los diamantes.
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