La colección se basa en el concepto de sedimentación y en las tradiciones artesanales mediterráneas.
Varios tipos de lavas y suelos cromáticamente compatibles entre sí, se combinan y mezclan enriqueciendo y suavizando la base negra de la cerámica reciclada sobre la que se depositan. La colección tiene una doble alma, que combina la última innovación tecnológica con técnicas artesanales originales.
Mutina y Patricia Urquiola han querido proponer las técnicas de elaboración manual de la terracota. El deseo de salir de la bidimensionalidad del revestimiento mural, se traduce en la experimentación del ladrillo, dando forma a nuevos elementos de diseño que son estéticamente bellos y funcionales con infinitas soluciones de aplicación para interiores y exteriores.
Elementos que emergen de la tierra, en su imperfección material, y que luego son marcados por el toque del hombre y el paso del tiempo.
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