La mesa en voladizo está diseñada como una superficie extensible muy flexible y universal para acompañar a los asientos bajos de los salones.
El diseño minimalista de la mesa es un ejercicio de pura función que dicta la forma. La articulación envolvente de su diseño comunica un suave diálogo entre el usuario y ella misma, estableciendo una nueva relación entre la mesa y el mobiliario interior.
El diseñador, Marc Thorpe, afirma que "lo que hace que esta mesa tenga éxito es el mínimo diseño posible, que la mesa trate menos de sí misma y más de las relaciones que crea"
La estructura es de acero con acabado de pintura en polvo.
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