La accesibilidad no está solo orientada a ciertos grupos. Es una parte fundamental del confort de todos los usuarios, independientemente de su edad o situación física. La consecuencia lógica de este desarrollo es la automatización de los elementos. El principio enuncia "El hombre define la acción" y por ello hemos llevado la automatización en la ventana a otro nivel: el herraje motorizado une la seguridad, la facilidad de oscilar tanto motorizada como manualmente, y siempre con el mayor confort de uso, haciendo que la mejor y mayor accesibilidad sea un beneficio para todos.
Beneficios para
los fabricantes
>Claro punto de contacto entre hoja y marco
>Sin tendido de cable en la hoja o en la cuna acristalar
>Fácil enganche y desenganche de la hoja
>Sin cables divididos gracias al pasacables a contacto
>Sin posibilidad de que tenga lugar una falsa maniobra
>Separación fija de los contactos
>Activador provisional - Prueba directamente en el taller
>Invisible - La estética no se ve afectada
>Sencillo montaje en la hoja
>Activador provisional para primera prueba en la obra
>Protección frente al viento integrada en el motor
>Clase protección 3 según la directriz de maquinaría impulsada eléctricamente para ventanas 2006/42/EG
Usos para
el usuario final
>Confort y accesibilidad
>La ventana mantiene la estética a pesar de la motorización
>Posible manipulación en cualquier momento tanto manual como motorizada
>Tras la manipulación manual, el motor se posiciona automáticamente para el siguiente uso
>Bajo consumo energético
>Posible retorno de movimiento tras error en la orden
>Seguridad por baja tensión en la ventana [24V]
>Completamente oculto en la hoja