El estilo chalet se creó en los Alpes y tiene una rica historia. En primer lugar, un chalet alpino era una vivienda, construida con una madera maciza, que debía proteger a la gente del mal tiempo en las montañas. El creciente interés por este estilo en todo el mundo no sólo se debe a su encanto, sino también a su excepcional practicidad. Los planos compactos y funcionales contienen todo lo que la familia necesita para una vida cómoda.
La característica principal de este estilo es el techo inclinado, que puede sobresalir hasta tres metros del perímetro de las paredes. Da a la casa de madera una belleza inusual. En tiempo de lluvia, este tipo de tejado protege los cimientos de la humedad, y en el periodo invernal permite retener la nieve. Los balcones y terrazas cubiertos permiten respirar aire fresco con cualquier tiempo, y si es necesario dejar los zapatos o el cochecito del bebé fuera sin preocuparse de que se moje con la lluvia.
---