Todo empezó con un simple detalle: la forma en que el cojín del asiento, de generosas proporciones, contrasta con el armazón. Los diseñadores Florian Kallus y Sebastian Schneider, del Studio KaschKasch, decidieron que ésta debía ser la base de su primera tumbona para Leolux. El resultado combina sencillez con versatilidad y comodidad relajada. ¡Bienvenido a Kudo!
Los diseños de KaschKasch tienen un hilo conductor. El dúo de Colonia busca reducir las formas a su esencia más pura, pero no a expensas de la usabilidad intuitiva y el atractivo. Esto es muy evidente en la concha de Kudo, donde cada línea tiene su propia tensión, y no es tan recta como parece. Esto añade profundidad al diseño y crea espacio para un confort excepcional.
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