Los waterstop de PVC son ideales para estructuras de hormigón, ya que soportan temperaturas de -30°C a +70°C. Ofrecen resistencia al envejecimiento, a las agresiones químicas y a las soluciones salinas y ácidas, manteniendo un alto rendimiento a lo largo del tiempo. Perfectos para la protección contra el agua en ambientes difíciles y compatibles con membranas sintéticas de PVC.
El tipo de PVC utilizado permite utilizar Waterstop en estructuras de hormigón expuestas a temperaturas comprendidas entre -30°C y +70°C, garantizando una resistencia considerable al envejecimiento, a la agresión química en ambientes alcalinos, al agua salobre y a las soluciones ácidas.