Casa de ahorro energético DWELLING

de diseño orgánicode 2 plantasde 1 planta

La tecnología de construcción con hormigón proyectado se utiliza ampliamente en todo el mundo. Los edificios construidos con este método se caracterizan por un diseño inusual y tienen una serie de ventajas en comparación con la tecnología de construcción convencional. Las tecnologías de inflado permiten crear las formas más diversas e inusuales de construcciones, mientras que el depósito de hormigón se utiliza para dotar a estas formas de resistencia y durabilidad. El resultado es la construcción de casas de hormigón in situ. El cerramiento de tela de PVC que se infla con equipos de presión y crea la forma de un futuro edificio se fija a una cimentación ligera preparada. La siguiente etapa consiste en aplicar sobre el cerramiento una capa aislante de poliuretano espumado y un refuerzo. A continuación, se realiza el gunitado, un proceso de colocación neumática del hormigón. En la última etapa se lleva a cabo la decoración de la casa. El cerramiento puede permanecer en el edificio durante todo el periodo de explotación o puede retirarse del mismo, en cuyo caso se realiza el acabado exterior. La ventaja de una instalación monolítica proyectada es que no se requiere una cimentación profunda. Además, el edificio de este tipo no tiene techo tal cual y, por lo tanto, no requiere ningún gasto en su realización. La casa creada por esta tecnología es tan ligera que puede erigirse sobre el tejado del edificio existente. La forma abovedada de la instalación (sin ángulos) permite ahorrar hasta un 30% en calefacción y acondicionamiento de los locales. Entre las ventajas de los edificios monolíticos se encuentran la alta velocidad de construcción, la resistencia, la capacidad de ahorrar calor, el funcionamiento económico y las amplias posibilidades de crear un diseño atractivo.