Adelantándose a su tiempo y con un espíritu moderno, Mathieu Matégot diseñó su contemporáneo cuenco Matégot en 1953. El aspecto característico del metal transparente añade una expresión de luz a este cuenco único y espacioso. Al igual que muchos de los diseños de Matégot, el cuenco lleva la marca del material sólido pero ligero Rigitulle; una fina lámina metálica perforada que equivale a un encaje de metal, donde la inspiración se extrae del propio material para explorar todo tipo de expresiones posibles de crear. Este lujoso material ha permitido a Matégot crear un cuenco artístico y decorativo que, además de su función de almacenamiento, actúa como una pieza de gran diseño que adorna cualquier habitación. El cuenco Matégot es una forma fácil y hermosa de añadir un toque de color a cualquier ambiente.
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