Es una forma bonita y rentable de controlar la luz del sol sin necesidad de persianas o cortinas, para que pueda controlar el deslumbramiento y el calor mientras mantiene la conexión con el exterior.
Por eso decimos que SageGlass no está diseñado para los edificios, sino para las personas. Una vez que experimente SageGlass, nunca querrá volver al vidrio tradicional.
SageGlass controla la luz solar y el calor que entran en un edificio, reduciendo significativamente el consumo de energía y mejorando el confort y el bienestar de las personas. SageGlass puede reducir la carga de refrigeración de un edificio en un 20% y las necesidades de climatización hasta en un 30%.
Es una solución más inteligente y elegante que los controles solares convencionales, como las persianas mecánicas, las cortinas y las celosías.
Composición de la unidad de doble acristalamiento
Acristalamiento exterior: Exterior laminado con un grosor de 8,8 mm a 16,8 mm.
Acristalamiento interior: Endurecido de 4mm a 10mm.
Distanciador: Distanciador de acero inoxidable relleno de desecante de 8 a 16 mm.
Junta: Sistema de doble junta de alto rendimiento compuesto por silicona y poliisobutileno (PIB).
Espacio de aire: 90% relleno de argón.
SageGlass se utiliza en los cerramientos de los edificios para controlar la ganancia de calor solar manteniendo la visión a través de las zonas acristaladas. SageGlass ya está instalado en cientos de viviendas y edificios.
Las ventajas de SageGlass son numerosas:
Transparencia permanente independientemente del estado del color, optimizando la aportación de la luz natural.
Ofrece un mayor confort en cuanto a luz, temperatura y acústica.
Respeta el proyecto arquitectónico al eliminar la necesidad de sistemas de sombreado mecánicos y/o fijos.
Permite un menor consumo de energía en el edificio y, por tanto, una reducción de la factura energética.
Control automático y/o manual sencillo.
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