El Espejo del Solsticio captura un momento etéreo de alineación, una fracción de tiempo en la que el Sol brilla con más intensidad y durante más tiempo. La piedra es como la Tierra, en un instante de quietud, abrazando el espejo y los detalles metálicos, como cálidos rayos de luz. Evocador, despojado de complejidades innecesarias, el Solsticio es en esencia una celebración de todos los elementos imperecederos que nos rodean -tiempo, materia, luz- y de uno mismo, reflejado.
Estructura de Travertino Romano en acabado natural, secciones metálicas de Latón Pulido, espejo en acabado Smokey.Diseñado y fabricado artesanalmente en Oporto.
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