video corpo

Montacargas profesional SLOPELIFT
para obra

Montacargas profesional - SLOPELIFT - GEDA GmbH - para obra
Montacargas profesional - SLOPELIFT - GEDA GmbH - para obra
Montacargas profesional - SLOPELIFT - GEDA GmbH - para obra - imagen - 2
Montacargas profesional - SLOPELIFT - GEDA GmbH - para obra - imagen - 3
Montacargas profesional - SLOPELIFT - GEDA GmbH - para obra - imagen - 4
Añadir a mis favoritos
Añadir al comparador
 

Características

Ámbito de utilización
profesional, para obra

Descripción

Las personas que viven en casas construidas en pendiente se enfrentan a diario al problema de transportar diferentes tipos de cargas a su casa, sobre todo cuando hacen reformas. Con el Slopelift de GEDA todo eso es un juego de niños Este pequeño pero potente y sobre todo muy manejable elevador permite transportar cargas de hasta 200 kg sin ningún esfuerzo. Transportar cargas masivas de ladrillos y paletas es bastante peligroso, ya que siempre existe el riesgo de perder la fuerza y los objetos pesados pueden caerse de las manos. Puede utilizar el Slopelift para casi cualquier inclinación de la pendiente y se puede montar con una longitud de escalera de 80 m. Tanto si está en la cima como en la base de la colina, el Slopelift de GEDA se puede controlar desde cualquier lado. Al igual que cualquier otro producto de GEDA, el ingeniero alemán ofrece dos tipos de variantes para el GEDA Slopelift: Estándar y Confort. Ambos polipastos pueden manejarse con sólo una rápida instrucción de los elementos de mando. En un abrir y cerrar de ojos se pueden transportar sin esfuerzo cargas extremadamente pesadas en la cima de la colina. Gracias a la construcción del Slopelift, el elevador puede montarse en cualquier pendiente. La longitud máxima de las orugas es de 80 m y los módulos separados se pueden componer de forma sencilla y rápida. Renovar las casas construidas en las laderas nunca ha sido tan fácil

---

VÍDEO

Catálogos

No hay ningún catálogo disponible para este producto.

Ver todos los catálogos de GEDA GmbH
* Los precios no incluyen impuestos, gastos de entrega ni derechos de exportación. Tampoco incluyen gastos de instalación o de puesta en marcha. Los precios se dan a título indicativo y pueden cambiar en función del país, del coste de las materias primas y de los tipos de cambio.