Los tabiques corredizos de vidrio Estfeller son una nueva forma de dividir el espacio con elegancia y transparencia respetando el entorno arquitectónico en el que se insertan. Estas paredes de vidrio están compuestas por varios elementos individuales en cristal, que se desplazan a lo largo de una guía fijada al techo y se montan uno tras otro hasta la totalidad de la pared. Se completa sin ningún tipo de guía sobre el suelo, excepto en la versión automática, el manejo de los elementos es sencillo, rápido y seguro. La ventaja de una pared corredera de vidrio es que Estfeller ocupa poco espacio cuando se almacena y cuando la pared está completa con todos sus elementos. En la pared se pueden insertar puertas simples o dobles para el paso.
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