Las puertas cortafuegos correderas se utilizan normalmente para grandes aberturas en paredes cortafuegos de edificios como almacenes industriales, naves de fábricas, centros comerciales, garajes, hangares, pabellones de ferias y similares por donde tienen que pasar carretillas elevadoras o medios de transporte o mercancías de mayor tamaño.
También se utilizan en formatos más pequeños porque sus estorbos al abrirse son menores si se comparan con las puertas batientes normales.
Puertas metálicas ensayadas según la norma UNI 9723 para fines de poco tráfico compuestas de carril para lado superior de acero perfilado de alta resistencia con carros de baja fricción pretaladrados para la fijación con tornillos o tornillos de expansión. Laberintos especiales contra la penetración de fuego y humo. Hojas formadas por paneles modulares de unión enrasada de doble chapa con núcleo especial contra incendios de espesor total 80 mm (120 mm para la versión 180 minutos de resistencia) sin cerradura y manillas empotradas en ambos lados. Puerta sin umbral, borde inferior de las hojas con cavidad para que se deslice en ella un perno de suelo para instalar más allá de la abertura de la pared. Contrapeso para el autocierre del portón con cuerda y fusible térmico. Si se pide con electroimán se omite el fusible térmico. Carcasa de protección de chapa de acero plegada a presión para el carril superior y el contrapeso. Juntas termoexpansibles en todos los laberintos solapados y bajo la hoja. Imprimación barnizada con polvos epoxi-poliéster endurecidos al horno de color gris claro RAL 7035. Embalaje en contenedores metálicos desechables de un solo uso.
Dimensiones de fabricación: desde puertas pequeñas hasta 18 m2 por hoja.
Peso aprox. 45 kg. /m2.
Etiqueta metálica de marca de conformidad.
Copia del certificado u homologación.
Declaración de conformidad.
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