La idea inicial de la serie HAT surgió de las formas claras y gráficas que suelen aparecer en los cómics. Al igual que los distintos personajes de una historia, a las tres formas de HAT se les puede asignar personalidades independientes. El color mate uniforme se asemeja a una sombra proyectada, mientras que los propios objetos resultan muy contemporáneos por su forma sencilla. Pueden combinarse de forma lúdica y colgarse en grupos mezclando diferentes formas, así como disponerse estrictamente utilizando sólo una de las formas en cada caso. Estos HAT resultan fantásticos en la mayoría de los entornos: vestíbulos y bares, encima del mostrador de una tienda o en un acogedor espacio privado. Todo es posible, desde la iluminación puntual hasta la ambiental.
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