Se necesitaron dos grandes características para el edificio The Edge de Ámsterdam, que una vez terminado recibió la mayor calificación BREEAM jamás registrada por el Building Research Establishment, el evaluador mundial de edificios sostenibles.
El elemento más destacado del atrio del edificio es una enorme escalera que se va estrechando a medida que se sube. De nueve metros de ancho en la base y más de cuatro metros en la cúspide, la escalera pesa 24 toneladas y requirió una construcción especializada. La anchura de la escalera obligó a reforzar con acero cada peldaño de roble.
La segunda escalera es una estructura independiente construida con peldaños de roble a juego, iluminación LED y balaustradas de cristal. La escalera, que termina en una plataforma en voladizo, ofrece un espacio para que los oradores se dirijan a grandes grupos de personas en el centro del edificio.
---