En Holanda, Krinkels BV es líder en el diseño y mantenimiento de espacios públicos, y en la búsqueda de formas más sostenibles de conseguirlo. Por eso, cuando el arquitecto Paul de Ruiter diseñó la nueva oficina de la empresa en Breda, sabía que la arquitectura tenía que hacer una clara declaración de eficiencia medioambiental.
Tres elementos lo demostraban claramente: el lucernario de ETFE, ligero y de bajo mantenimiento, situado sobre el atrio y, sobre todo, la zona circular de la planta baja, de 308 m2, y los dos tramos de escaleras que llevan al nivel superior, en los que se utilizó madera con certificación FSC.
La madera del suelo y de los peldaños se colocó para crear el efecto de los anillos de crecimiento de un árbol. Para ello, EeStairs y el artista holandés de la madera, Jakko Woudenberg, tuvieron que trabajar de forma especialmente estrecha y precisa para garantizar que los anillos más oscuros y más claros del suelo continuaran sin interrupción en las contrahuellas de las dos escaleras. Las estructuras de acero de las escaleras, con EeSoffits superlisos, se entregaron en dos segmentos y fueron instaladas y pintadas in situ por EeStairs.
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