Moderna y sofisticada, esencial e impactante, la butaca Alix se distingue por el entramado del respaldo, que se obtiene uniendo bandas de cuero. Retomado en la inclinación oblicua de las patas posteriores, este motivo se inspira en las decoraciones con forma de diamante que adornaban muchas de las entradas milanesas de principios del siglo XX. Su fina estructura metálica sostiene suaves cojines de tejido o piel.