El compacto y cómodo sillón Waikiki está fabricado en madera de haya torneada y se completa con soportes de latón, correas elásticas y un tapizado acolchado. Los distintos componentes encajan fácilmente gracias a una construcción basada en el principio de tensegridad, que equilibra las fuerzas de tracción y compresión, sin utilizar tornillos ni cola.
La silla se inspira en la "silla Safari", una silla plegable utilizada por los oficiales británicos a finales del siglo XIX. Aunque el uso de la silla no implica montarla y desmontarla con frecuencia, su diseño permite separar fácilmente los distintos materiales que componen cada elemento. Esta característica, también expresada en el lenguaje visual general, fomenta la circularidad de los materiales
y reduce la huella ecológica, al tiempo que ofrece la posibilidad de sustituir e intercambiar los componentes siempre que sea necesario.
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