Un mueble con alma silenciosa, práctico y sostenible. La silla Frisia recupera la tradición de Crassevig por la madera y la proyecta hacia una nueva dimensión de futuro, según una lógica optimizada de materiales, espacios y líneas. Las formas sencillas y discretas, casi arquetípicas, hacen de Frisia un diseño tanto para espacios contract como domésticos, potenciando su resistencia ergonómica, su apilabilidad y su estética transversal, apta para todos los contextos. Cada elemento que lo compone equilibra tiempo, materiales e impacto medioambiental y está diseñado para reducir al máximo los residuos, garantizando al mismo tiempo un fácil montaje gracias a la fijación mecánica.
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