Asimetrías flotantes y tejidos suaves proporcionan atmósferas delicadas, diseñando espacios ideales para los jóvenes soñadores, donde pueden crecer. La suave felpa sostiene las cortinas, mientras que el tul bordado nos recuerda que el mundo de un niño se crea jugando.
Delicados lazos surgen del terciopelo blanco iluminado por exquisitos cristales de Swarovski. La alternancia de blanco, azul empolvado y rosa pálido confiere al conjunto un encanto romántico y apagado.
Suaves lazos se elevan desde el terciopelo blanco, bañados por la luz de exquisitos cristales de Swarovski, como estrellas para jóvenes soñadores.
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