Una silla con brazos diseñada por Michael Anastassiades como un oxímoron, con una rigurosa estructura metálica que acoge un asiento cómodo y acogedor. La inspiración: los gestos elegantes e impecables del patinaje artístico
En la silla de diseño Flutz, los reposabrazos están formados por dos finas placas de aluminio unidas por una placa invisible, que tiene la función tanto de dar firmeza a la base como de sostener el cómodo asiento acolchado, que así parece suspendido.
CARACTERÍSTICAS
Cómoda y elegante, Flutz se coordina con la mesa de comedor Ordinal, también firmada por el diseñador chipriota, para ofrecer una completa propuesta de mobiliario minimalista. Además, gracias al trabajo realizado por Cassina LAB, todos los elementos de la silla se pueden desmontar al final de su ciclo de vida.
ESTRUCTURA
De aluminio pintado color antracita, negro o anodizado natural.
ACOLCHADO
Acolchado de poliuretano revestido con guata de PET reciclado.
TAPICERÍA
Extraíble en tela o piel de las Colecciones Cassina.