En el centro de la pared, de esquina a esquina o apoyado en una de ellas. El cabecero se estira, puede diseñarse al milímetro y oculta un compartimento de almacenamiento que se extiende a lo largo de toda su longitud. En lamé o lacado mate, ofrece una amplia gama de acabados. Let'space se adapta a su tamaño y a su entorno. También puede acoger la luz, que se enciende, apaga y regula en intensidad mediante un cómodo mando a distancia. Suave y difusa, abraza los espacios que la albergan.
El cabecero que hace espacio
Fotografías, cuadros, revistas, libros, respaldos textiles: el compartimento de almacenamiento, de 10 centímetros de profundidad, da cabida a lo que hay que tener a mano nada más despertarse o justo antes de dormirse. Dos paneles de longitudes diferentes colocados uno frente al otro crean un juego dinámico de planos escalonados.
El cabecero se libera del somier, extendiéndose sobre la pared e iluminándola discretamente.
La luz se sitúa en el espacio entre la pared y el cabecero. En el caso de Let'space, que se extiende de esquina a esquina, se coloca sólo en la parte superior.
Se adapta a su pared
La organización industrial en lógica 4.0 adapta Let'space a su espacio. El cabecero puede ocupar toda la longitud de la pared o un hueco, quedar libre en el centro o inclinarse hacia un lado.
¿Caja contenedor o somier mínimo? Cada elemento de Let'space -incluido el cabecero- puede personalizarse como un traje a medida para adaptarse a la perfección a su dormitorio. Los cojines se pueden añadir, quitar y mover gracias al perfil del cabecero sobre el que se pueden deslizar para conseguir looks siempre cambiantes.
Nada se deja al azar.
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